- El VRS representa una de las causas más frecuentes de infecciones respiratorias en niños entre otoño e invierno. El cuadro respiratorio se presenta frecuentemente en niños entre 6 meses a 5 años pero con mayor incidencia en menores de 2 años, en los cuales se manifiesta con síntomas más severos. Sin embargo, la infección puede ocurrir en individuos de todas las edades, incluyendo personas de tercera edad.
- Es un virus altamente contagioso, que puede sobrevivir hasta 7 horas en superficies no porosas. Se difunde con las secreciones nasofaríngeas de los individuos infectados por contacto directo o a través de las gotas de saliva. Las puertas de entrada del virus son la conjuntiva ocular y la mucosa nasal y oral. La transmisión se suele producir por contacto directo, pero también es posible a través de las manos o por contacto con objetos contaminados Su transmisión puede ocurrir a través de las secreciones respiratorias de los pacientes, de las manos u objetos que han estado en contacto con los pacientes. De allí la necesidad de una estricta vigilancia de higiene en el hogar, lavarse las manos antes de atender a los lactantes y evitar el contacto de éstos con personas con infecciones respiratorias agudas. Medidas que son también válidas para el cuidado de adultos mayores
- El virus penetra a través de la mucosa respiratoria u ocular desde donde distribuye al resto del aparato respiratorio, produciendo síntomas tales como rinitis,faringitis, otitis media, sinusitis, tos perruna, traqueobronquitis, disfonía, habitualmente precedidos por un cuadro de resfrío. En los niños mayores y en los adultos la infección puede ser asintomática o manifestarse simplemente como un resfriado común. Sin embargo, en los pacientes inmunocomprometidos de cualquier edad la infección puede revestir suma gravedad. Estos síntomas habitualmente se agravan en la noche. Estos síntomas pueden evolucionar hasta cuadros más severos como bronquiolitis y neumonía, especialmente en lactantes menores.En este grupo de pacientes, los cuadros se magnifican dado que sus vías aéreas son más pequeñas y una inflamación en sus mucosas produce un mayor grado de obstrucción.
- ¿Se puede prevenir la infección por el VRS?. En gran medida, sí. La profilaxis de exposición es una medida eficaz: evitar el contagio a base de extremar las medidas higiénicas con lavado de manos antes y después de tocar al niño infectado y evitar el hacinamiento de niños en poco espacio, evitar la contaminación intradomicilaria (tanto del cigarro como de la calefacción con parafina o leña), ventilar los espacios cerrados, evitar el contacto con personas enfermas y estimular la lactancia materna. En los niños de más riesgo es preferible no llevarlos al jardín infantil antes del año de vida.
¿Cómo se contagia el VRS?. La única fuente de contagio es el paciente infectado, ya que no se ha demostrado su presencia en animales domésticos. Las secreciones de las vías respiratorias altas están muy cargadas de virus y son muy contagiosas. Sin embargo, la transmisión directa por gotitas no es el mecanismo más importante. Mucha mayor importancia tienen la contaminación de las manos y objetos que han estado en contacto con estas secreciones. Por esta razón hay que extremar las medidas higiénicas en el trato con estos ni- ños (lavado de manos, uso de guantes, batas protectoras, etc.). La eliminación de virus a través de las secreciones de los pacientes puede durar de 3 a 8 días, si bien en los lactantes muy pequeños se puede prolongar hasta 3 ó 4 semanas. El virus persiste en las superficies de objetos contaminados durante varias horas y en las manos al menos durante media hora. - fuente : http://www.aeped.es/sites/default/files/documentos/vrs.pdf